La limpieza y el blanqueamiento de los dientes son dos tratamientos muy diferentes que no deben confundirse.

• La limpieza o tartrectomía nos aporta dos beneficios: por un lado nos ayuda a eliminar el sarro y los restos acumulados en la dentadura que pueden originar problemas mayores; por otro lado nos permite descubrir problemas ya existentes que estaban encubiertos y no eran visibles a simple vista.
• El blanqueador dental se utiliza para recuperar el blanco inicial de nuestra dentadura. El oscurecimiento de los dientes se produce de forma progresiva debido a factores genéticos y a los hábitos de consumo. Antes de optar por este tratamiento pide consejo a tu dentista, ya que no debe aplicarse a personas con dientes sensible, caries o pérdidas de esmalte.

La limpieza es un tratamiento eficaz para mantener sana y saludable tu dentadura. Mientras que el blanqueador dental tiene una finalidad más estética.

Tu dentista te aconsejará del mejor tratamiento dental.